¿Qué ha pasado y qué puede pasar con el gran capital?
La crisis orgánica en Nicaragua, exacerbada por la dictadura Ortega-Murillo, refleja la inestabilidad socioeconómica y el enriquecimiento del gran capital, amenazando el futuro del país.
La crisis orgánica en Nicaragua, exacerbada por la dictadura Ortega-Murillo, refleja la inestabilidad socioeconómica y el enriquecimiento del gran capital, amenazando el futuro del país.
La oposición formal y el gran capital en Nicaragua enfrentan la dictadura de Ortega-Murillo sin una estrategia unificada, lo que perpetúa la corrupción y la desigualdad económica en el país.
La batalla política requiere estrategia, organización, educación y conducción táctica y estratégica para derrotar a la dictadura Ortega-Murillo. Solo así se logrará la caída del régimen.
El crecimiento económico de Nicaragua depende de exportaciones, remesas, cooperación, préstamos e inversión extranjera, concentrando el dinero en manos de la dictadura y sus aliados.
Las calles y plazas reflejan los conflictos sociales y políticos. La represión de la dictadura busca mantener invisibles las demandas de los excluidos, mientras el deterioro social se agrava.
La estrategia del gradualismo político híbrido implica usar diversas tácticas de poder, desde la represión hasta la manipulación, para mantener el control y la hegemonía.