El gobierno de los peores
El régimen Ortega-Murillo enfrenta un creciente descontento social, crisis económica y desconfianza generalizada, exacerbados por el “capitalismo de amiguetes”, corrupción y una gestión política ineficaz.
El régimen Ortega-Murillo enfrenta un creciente descontento social, crisis económica y desconfianza generalizada, exacerbados por el “capitalismo de amiguetes”, corrupción y una gestión política ineficaz.
El régimen Ortega-Murillo se mantiene mediante círculos concéntricos de poder, represión y alianzas con el gran capital, enfrentando una crisis de implosión y aislamiento internacional.
El autoritarismo se erosiona con la estupidez en el poder, llevando al declive a través de la represión, mentiras y errores estratégicos, aislando al régimen Ortega-Murillo en Nicaragua.
La dictadura Ortega-Murillo busca borrar la memoria histórica y promover el olvido, favoreciendo la impunidad y el enriquecimiento ilícito mientras reprime y manipula.
El régimen Ortega-Murillo ha fomentado la corrupción y el enriquecimiento ilícito, creando una alianza con el gran capital y reprimiendo a la población para mantener el poder.